¿Qué puedo contar de este trabajo? La verdad.
al principio como todos los trabajos empiezas con el ánimo alto pensando que puedes hacerlo lo mejor posible y eso es cierto hasta que una horrible cafetera plateada se interpone en tu camino. NO sin esfuerzo dejé a un lado la maravillosa tentación de coger aquel intrumento y hacerlo desaparecer, posiblemente mis compañeros de clase hubiesen encubierto el delito, puede que no.
La verdad me ha decepcionado bastante ver como no lograba conseguir después de cuatrro cambios e efecto deseado.
Esta no es la última foto; en el retoque final arregle un lado de las telas y estropee la jarra metálica.
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